Cada país tiene sus propias leyes fiscales que establecen cómo deben tratarse los impuestos, incluyendo cuánto dinero se debe pagar, los plazos para hacerlo, cómo presentar declaraciones y otros aspectos relacionados. Estas regulaciones pueden cambiar con el tiempo y varían según el lugar. Si trabajas de manera independiente, ¿también debes cumplir con estas normativas fiscales?
¿Qué es el régimen fiscal?
El régimen fiscal, también llamado sistema tributario, establece las reglas que gobiernan la situación financiera de individuos y entidades, definiendo sus derechos y responsabilidades según su actividad económica.
Régimen fiscal para personas físicas
- Incorporación fiscal: Aplicable a quienes realizan actividades empresariales o prestan servicios que no requieren título profesional, con ingresos anuales de hasta dos millones de pesos. Ejemplos incluyen fruterías, talleres mecánicos, salones de belleza, entre otros.
- Actividades empresariales: Para personas físicas que realicen actividades industriales, comerciales, agrícolas, ganaderas, pesqueras o de transporte, sin un límite mínimo de ingresos. Ejemplos son restaurantes, ferreterías, guarderías, artesanías, entre otros.
- Arrendamiento de inmuebles: Aplicable a quienes obtienen ingresos por alquilar departamentos, habitaciones, locales comerciales u otros bienes inmuebles.
- Servicios profesionales: Dirigido a profesionales de la salud, freelancers u otros que prestan servicios profesionales de forma independiente, sin estar vinculados a una empresa como empleados asalariados.
- Asalariados: Personas que trabajan bajo la dirección de una organización o empresa, presentando una declaración fiscal anual ante la hacienda pública.
Regímenes fiscales para personas morales
- General: Aplica a personas que han establecido sociedades con el objetivo de obtener beneficios económicos, como seguros, bancos, empresas mercantiles y arrendadoras financieras.
- Sin fines de lucro: Se refiere a colectivos o corporaciones que se han unido con propósitos sociales sin buscar beneficios económicos directos, como sindicatos de trabajadores, colegios profesionales, administradores de fondos y sociedades de inversión.
El régimen fiscal te indica cómo calcular y pagar impuestos. Toda persona o empresa que realice actividades económicas debe inscribirse en una categoría específica para cumplir con sus deberes fiscales.